MADRID29/04/2024 MIGUEL MUÑOZ@MMUNOZORT
Público es
Tras cinco días de reflexión como consecuencia de los ataques de la ultraderecha a su esposa Begoña Gómez y otros miembros de su familia, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha anunciado que continuará en su cargo. «He decidido seguir, con más fuerza si cabe», ha dicho. Además ha llamado a la sociedad española ha movilizarse «por la dignidad y el sentido común».
Sánchez envió una carta a la ciudadanía el pasado miércoles tras la apertura de diligencias de un juez hacia su esposa Begoña Gómez. La querella la había presentado la organización ultraderechista Manos Limpias. A esa carta se ha referido el líder del Ejecutivo durante su comparecencia pública celebrada en Moncloa este lunes.
«Como saben, el pasado miércoles escribí una carta dirigida a la ciudadanía. En ella les planteaba si merecía la pena soportar el acoso que desde hace diez años sufre mi familia a cambio de presidir el Gobierno de España. Hoy tras estos días de reflexión tengo la respuesta clara», ha comenzado Sánchez.
«Si aceptamos como sociedad que la acción política permita el ataque indiscriminado a personas inocentes, no merece la pena. Si consentimos que la contienda partidista justifique el ejercicio del odio y la insidia hacia terceras personas, no merece la pena. Si permitimos que las mentiras más groseras sustituyan el debate racional basado en evidencias, entonces no merece la pena. Por muy alto que sea, no hay honor que justifique el sufrimiento de las personas que uno más quiere y respeta», ha continuado.
El presidente del Gobierno ha reconocido que la carta «pudo desconcertar» porque no obedece a un cálculo político. «Soy consciente de que he mostrado un sentimiento que en política no suele ser admisible. He reconocido ante quienes buscan quebrarme, por lo que represento, que duele vivir esta situación que no deseo a nadie. También porque sea cual sea nuestro oficio vivimos en una sociedad donde se nos exige mantener la macha a toda costa. Pero hay veces que la única forma de avanzar es detenerse, reflexionar y decidir con claridad por dónde queremos caminar», ha añadido.
Sánchez ha pedido decir «basta» como sociedad a esta «degradación» de la vida pública. «He dado este paso por motivo personales pero son motivos que todo el mundo puede entender porque responden a valores troncales y familias de una sociedad como la española. No es una cuestión ideológica, hablamos de respeto, de dignidad», ha manifestado.
Sánchez ha hecho referencia a que no se puede permitir que se vuelva a relegar el papel de la mujer al ámbito doméstico, en referencia a su esposa. «Si permitimos que la sinrazón se convierta en rutina, haremos un daño irreparable a la democracia», ha añadido.
Movilización del PSOE, clave
«Exigir resistencia incondicional a los líderes objeto de esa estrategia es poner el foco en las víctimas y no en los agresores. Y confundir libertad de expresión con libertad de difamación es una perversión democrática de desastrosas consecuencias. Por tanto, la pregunta es sencilla. ¿Queremos esto para España?», ha seguido Sánchez.
«Mi mujer y yo sabemos que esta campaña de descrédito no parará. Llevamos diez años sufriéndola. Es grave. Pero no es lo más relevante. Podemos con ella. Lo importante, lo verdaderamente trascendente, es que queremos agradecer de corazón las muestras de solidaridad y de empatía que hemos recibido, de todos los ámbitos sociales», ha destacado Sánchez.
El PSOE ha sido mencionado expresamente por Sánchez tras la convocatoria del pasado sábado en Ferraz donde miles de personas le pidieron que se quedara. «Gracias a esa movilización social que ha influido decisivamente en mi reflexión y que vuelvo a agradecer, quiero compartir con todos ustedes lo que finalmente he decidido. De ello he informado previamente al Jefe del Estado esta misma mañana. He decidido seguir. Seguir con más fuerza si cabe al frente de la Presidencia del Gobierno», ha anunciado.
Para el presidente, esta decisión no supone «un punto y seguido» sino que «es un punto y aparte». Sánchez asume su «compromiso de trabajar sin descanso, con firmeza y con serenidad, por la regeneración pendiente de nuestra democracia y por el avance y la consolidación de derechos y libertades».
Del mismo modo, el líder socialista ha reclamado que España haga una «reflexión colectiva», que realmente ya se ha comenzado a hacer. También ha llamado a la movilización social. «Solo hay una manera de revertir esta situación: que la mayoría social, como ha hecho estos cinco días, se movilice en una apuesta decidida por la dignidad y el sentido común, poniendo freno a la política de la vergüenza que
llevamos demasiado tiempo sufriendo, porque esto no va del destino de un dirigente particular».
Una reflexión colectiva que abra paso a la limpieza, a la regeneración, al juego limpio. Llevamos demasiado tiempo dejando que el fango colonice impunemente la vida política, la vida pública, contaminándonos de prácticas tóxicas inimaginables hace apenas unos años», ha afirmado.
Sánchez ha insistido en apelar a la conciencia colectiva de la sociedad española. «Una sociedad que, desde el acuerdo generoso, supo sobreponerse a las terribles y profundas heridas del peor de sus pasados. Una sociedad que consiguió vencer de manera ejemplar todos los desafíos democráticos que sufrió, que superó con éxito una pandemia, que pese al difícil contexto geopolítico que sufrimos con guerras en Oriente Medio y en Ucrania, vive un muy buen momento económico y respira paz social», ha afirmado.
El presidente del Gobierno pide a la sociedad española que vuelva a ser «ejemplo e inspiración para un mundo convulso y herido». «Los males que nos aquejan no son ni mucho menos exclusivos de España. Forman parte de un movimiento reaccionario mundial que aspira a imponer su agenda regresiva mediante la difamación y la falsedad, el odio y la apelación a miedos y amenazas que no se corresponden ni con la ciencia ni con la racionalidad», ha destacado.
«Mostremos al mundo cómo se defiende a la democracia. Pongamos fin a este fango de la única manera posible: mediante el rechazo colectivo, sereno, democrático, más allá de las siglas y de las ideologías, que yo me comprometo a liderar con firmeza como presidente del Gobierno de España», ha concluido.