El parlamento surcoreano no ha sido capaz de destituir al presidente Yoon Suk-yeol por falta de quorum en la votación para sacar adelante una moción en su contra.
Para poder ejecutar la medida, era necesario que al menos ocho asambleístas del partido de Gobierno votaran para deponer al mandatario. Sin embargo, el proceso estuvo bastante lejos de ejecutarse, pues de los 300 diputados solo participaron 195, lo que hacía imposible conseguir los dos tercios del total que se requerían en un principio.
El proyecto de ley, entonces, fue derogado.
Según reportan medios locales, luego de legislar sobre una normativa diferente, los miembros del Partido del Poder Popular (al que pertenece Yoon Suk-yeol) salieron de la sala a modo de boicot en contra de la propuesta de moción.
Solo tres de los parlamentarios del partido gobernante participaron en el proceso. Uno de ellos, Kim Sang-wook, aseguró haber votado en contra, puesto que no estaba de acuerdo con la determinación de la oposición. Sin embargo, manifestó también su consideración sobre el presidente, del que dijo que “no está calificado”.
Con información de RT.
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