Las crecientes tensiones geopolíticas globales podrían tener un impacto directo en la producción mundial. El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima una caída de medio punto en el año 2026.
Las causas directas podrían ser el aumento de aranceles entre bloques y la incertidumbre constante en torno a la política comercial de los años venideros.
Al respecto, el jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, aseguró que las divisiones geoeconómicas recientes y las tensiones entre naciones, entre otros factores, “deprimirán la inversión, la actividad económica y el consumo”.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional hizo públicas sus últimas perspectivas económicas, en las que mantuvo el pronóstico de crecimiento global en un 3,2 % para 2024, mientras que se redujo una décima en el 2025.
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Los focos más notables que representan un riesgo para la economía mundial en la actualidad son Oriente Medio y el frente ruso-ucraniano.
Según el directivo del ente financiero, hay “una capa asociada que proviene de la creciente incertidumbre relacionada con la política comercial futura”, además de otra que se asocia con “el aumento de los aranceles entre distintos bloques, que perturbará el comercio, asignará de forma incorrecta los recursos y afectará a la actividad económica”.
Con información de EFE.
