Público / EFE
Estados Unidos vetó este miércoles por cuarta vez desde que empezó la guerra en Gaza en octubre de 2023 una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que pedía un alto el fuego «inmediato, incondicional y permanente» en la Franja, donde ya han muerto casi 44.000 personas.
La resolución, presentada por los diez miembros no permanentes del Consejo —en una inusual muestra de consenso multilateral—, cosechó catorce votos a favor, pero no saldrá adelante por el derecho de veto de Estados Unidos como miembro permanente.
El texto recogía demandas específicamente dirigidas a Israel para permitir el acceso ilimitado de ayuda humanitaria en Gaza y el rechazo de «cualquier intento de matar de hambre a los palestinos». Además, incluía una proclamación de la UNRWA (Agencia de la ONU para los refugiados palestinos) como pilar del esfuerzo humanitario en Gaza, en un momento en que se aproxima la práctica prohibición de facto de sus actividades por parte de Israel.
El texto había sido negociado durante varias semanas, según explicó la embajadora de Guyana, Carolyn Rodrigues-Birkett, quien dijo que el lenguaje ha sido cuidadosamente redactado para poder acomodar los deseos de todos los países. Fuentes diplomáticas señalaron a este respecto que los cambios se fueron introduciendo para hacer el texto aceptable a Estados Unidos y sortear así su veto, lo que finalmente no ocurrió.
Robert Wood, embajador adjunto de Estados Unidos ante la ONU, justificó la oposición de su país porque la resolución no condicionaba el alto el fuego a la liberación inmediata de los 101 rehenes aún retenidos por Hamás, pues si bien menciona esa liberación, no la vincula con el alto el fuego.
Wood añadió que la resolución tampoco condena explícitamente los ataques «terroristas» del 7 de octubre de 2023, que supusieron el principio de la guerra.
Danny Danon, embajador de Israel ante la ONU, anticipándose a la votación, dijo a los periodistas que una resolución semejante «no sería otra cosa que una traición, una traición a los 101 rehenes todavía en manos de Hamás, a sus familias y a los meros principios que la ONU dice defender». Un texto semejante, afirmó Danon, «enviará un mensaje a los terroristas de que pueden actuar impunemente, le dice a Hamás y los demás terroristas que pueden asesinar, violar y secuestrar a inocentes y la comunidad internacional les recompensará por ello».