Los establecimientos que vendan o distribuyan fuegos artificiales a menores de edad podían enfrentar una pena de tres a doce meses de cárcel.
Así lo aseguró Pablo Palacios, comandante de Bomberos de Caracas en una entrevista a la cadena Unión Radio.
“No debe llevar ningún tipo de artificio pirotécnico en el bolsillo. No usarlo, distribuirlo ni desplegarlo en botellas, tubos, espacios confinados donde haya bombonas, combustible, arbusto o casas”, sostuvo.
Del mismo modo, el funcionario recordó que las campañas de concienciación y el accionar de las autoridades han permitido que en las últimas navidades no se registren accidentes multitudinarios de gravedad relacionados a la pirotecnia.
Aunado a esto, recordó a los usuarios evitar prácticas peligrosas, que no solo pueden ponerlos en riesgo a ellos, sino también a su comunidad.
Con respecto a las penas por vender fuegos artificiales a menores, detalló que de por medio hay condenas importantes, de hasta doce meses de cárcel.