La médica venezolana Yeraldin Faneite, de 36 años y oriunda del estado Carabobo, falleció el 1 de julio tras ser arrollada en Iquique, región de Tarapacá, al norte de Chile. El conductor que la embistió huyó del lugar, pero autoridades chilenas lo detuvieron y dictaron prisión preventiva en su contra.
Detalles del fatal accidente y la huida del responsable
Según una publicación de la cuenta Crónicas de Chile en Instagram, un vehículo negro embistió a Faneite en el sector industrial de Zofri, lanzándola hacia las ruedas de un camión. El conductor del camión, sin percatarse de la situación, continuó su marcha cuando el semáforo cambió a luz verde, atropellando a la venezolana. Un video difundido por el medio @soychile capturó el trágico suceso.
«Era mi tía y no merecía morir así. Solo Dios decide cuándo quitarnos la vida y no justamente querría que fuera por un ser humano tan despiadado como este hombre. Ojalá en donde quiera que esté ese hombre la pase más mal, porque no merece ni la muerte», escribió Diana de La Hoz, familiar de la víctima, en Facebook.
La fiscal Camila Albarracín informó que el imputado, B.A.D.T., conducía un vehículo recién adquirido por un tercero y al que le realizarían el cambio de volante. La fiscal detalló que el conductor, al girar bruscamente desde la avenida Circunvalación hacia la calle Luis Jaspard, «embistió directamente a la venezolana, lanzándola violentamente hacia las ruedas de un camión que transitaba por el lugar».
El hombre huyó sin prestar ayuda ni dar aviso a las autoridades, pero efectivos de la Sección de Investigación Policial (SIP) lo detuvieron.
Proceso judicial y clamor de justicia familiar
El Juzgado de Garantía de Iquique dictó medida cautelar de prisión preventiva para el imputado, de nacionalidad chilena. La fiscalía de Iquique lo acusó del delito de homicidio. El tribunal estimó que dejar al imputado en libertad representa «un peligro para la seguridad de la sociedad», razón por la cual ordenó su ingreso a prisión mientras avanza la investigación penal.
Yeraldin Faneite, quien se ganaba la vida como vendedora de roscas, era madre de dos hijos y llevaba pocos meses radicada en Chile junto a su esposo. Un familiar escribió en Facebook que Faneite «llegó a Chile en busca de oportunidades y un mejor futuro, con el corazón roto, por dejar a quienes más amaba en Venezuela; salió por una migración forzosa».
El familiar también destacó que la médica no pudo ejercer su profesión en Chile y esperaba agilizar sus trámites migratorios. Mientras tanto, trabajaba en un semáforo, «donde una persona imprudente y sin escrúpulo le arrebató la vida». El escrito culmina con un desgarrador testimonio: «Solo deseaba salir esa tarde y ver a sus hijos que pronto saldrían del colegio». Los parientes de Faneite claman por justicia, sin importar la nacionalidad de la víctima.
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