En la 58ª Jornada Mundial de las Comunicaciones, la Iglesia Católica nos invita a reflexionar sobre la importancia de una comunicación plenamente humana, basada en la inteligencia artificial y la sabiduría del corazón.
En un mundo cada vez más digitalizado, es fundamental recordar que la verdadera comunicación va más allá de las máquinas y algoritmos. Se trata de conectar con las personas en su realidad concreta, escuchando sus necesidades y acompañándolas en su camino de fe.
«Que nuestros medios de comunicación sean canales de amor, esperanza y solidaridad, promoviendo la justicia y la paz en un mundo sediento de autenticidad y compasión».
¡Celebremos juntos esta jornada mundial, llevando el mensaje de Cristo a todos los rincones del mundo con una comunicación auténtica y humana!
Más información @zgiovanny
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