El rapero estadounidense Kanye West, habitual participante de polémicas entre famosos, asegura haber sido diagnosticado con autismo.
De acuerdo al intérprete, un primer diagnóstico recibido en el año 2016 habría indicado que es bipolar. Desde aquel momento, el cantante habría tenido comportamientos erráticos, debido a la decisión de orientar su tratamiento psicológico a dicha dolencia.
No obstante, su esposa, recientemente viralizada por un vestido polémico durante la entrega de los premios Grammy, le habría impulsado a buscar otra opinión profesional para tener un diagnóstico más claro.
Poco después afirmaba haber «llegado a descubrir que realmente es un caso de autismo el que yo tengo».
Del mismo modo, el intérprete lamentó que sus familiares tuvieran que cargar con las consecuencias de su propia condición. «Es tan difícil para ellos, porque soy un hombre adulto: no pueden controlar mi cuenta de banco, no pueden controlar lo que digo en Twitter», declaró.