El venezolano Carlos Curé resultó primer finalista en la VIII edición del Premio de Cuento Santiago Anzola Omaña con su obra “Dos Cannolis”.
Curé, nativo de San Felipe, estado Yaracuy, es administrador y cursa la carrera de Derecho, pero escribe cuentos y novelas cortas, desde los 15 años de edad.
Participó en el taller de escritura de la Casa Arturo Uslar Pietri y obtuvo mención honorífica en la Feria Internacional del Libro de la Universidad de Carabobo (UC) con un cuento que se llama el telegrafista.
En el Premio de Cuento Santiago Anzola Omaña, que es a nivel de todas las universidades del país los finalistas fueron “Dos cannolis” como primer finalista, con el seudónimo Ulises Dhartha, “Cadencia frigia” como segundo finalista, bajo el seudónimo José Cafard y “El negro Juan” como tercer finalista, que tiene como seudónimo Siwe ́e.
En «Dos cannolis”, la hija de un inmigrante italiano en Venezuela cuenta su historia y su vínculo con la heladería familiar a través de nociones de lo cotidiano, la empatía y la migración.
Dentro de la aparente simplicidad de la trama se desarrollan sugerencias interesantes acerca de la relación del padre inmigrante con su hija, junto al ambiente rutinario de la heladería.
Se destaca cierta sencillez narrativa que logra captar una historia intimista y poco pretenciosa aunque muy bien llevada, y que atrae desde la primera línea.
La relación entre la narradora-protagonista y la pareja que recurrentemente visita el lugar focaliza el eje del relato. El jurado destaca las excelentes descripciones llevadas a cabo a lo largo del cuento, tanto de ambiente como de personajes.
Curé aseguró que no se puede vivir de la escritura en Venezuela, por lo costoso de la impresión, muchos lo hacen en Colombia.
Lea también: Si se puede aprender a manejar las emociones y ser gentil