Este domingo de Ramos, el alcalde Johan Casteñeda, su esposa Corina de Castañeda, sus hijos y cientos de feligreses guacareños, se reunieron para la tradicional bendición de las palmas, en los espacios del Parque Metropolitano San Agustín, para dar inicio a las actividades religiosas de la Semana Santa.
El por el párroco Óscar Martínez bendijo las palmas y luego los fieles partieron en procesión hasta la plaza Bolívar de Guacara cantando alabanzas al Señor, recordando el paso de Jesús de Nazareth por este mundo.
Luego fue oficiada la Santa Misa durante la cual el Padre Martínez dio un emotivo mensaje de amor, esperanza y unión.
Recordó que los días de la Semana Mayor deben ser para recordar la pasión, muerte y resurrección de Jesús, que sirva para renovar la esperanza y la fe en la promesa de la vida eterna mediante el sacrificio del hijo de Dios.
Enfatizó en las calamidades que vive la humanidad ante la falta de solidaridad con los que sufren, entre estos: las víctimas de las guerras, secuestros, enfermos, migrantes que son condenados por decidir vivir en otro país, y aquellos niños que son maltratos y los que no tienen el privilegio de nacer porque son abortados.
También pidió no ser indiferentes al sacrificio del Cristo y tener ojos de fe y de misericordia para socorrer a los que sufren y cargan con la Cruz del Maestro y pueden convertirse en cómplices de los actos inhumanos.
Además, elevó una oración para que la justicia prevalezca y la muerte de Jesucristo en todas sus expresiones se convierta en una resurrección de gloria.
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